“Ciudad Elipse”

José Pablo Ureña

29 noviembre - 29 febrero

La exposición visual “Ciudad Elipse”, de José Pablo Ureña (1987), aparece como una de las series más literarias y narrativas de su producción; un casi diario de las historias y visiones que ha recolectado en lo que conocemos como la ciudad de San José. Desde hace años Ureña ha circulado la ciudad como un explorador, que, a diferencia de un caminante, se detiene pausadamente para registrar los pequeños descubrimientos que aparecen en sus aventuras (o des aventuras).

El artista describe: “Diez años después de mis primeros panoramas, sigo regresando a San José atrapado en las formas urbanas que revelan su pulso, como si pudiera remendar su herida arquitectónica. Encausado por las fuerzas que aceleran y detienen las cosas, la inercia del girar simbólico, la atracción del significado reversible. Lo que intento es recrear el asombro en la ciudad, cruzar la elipse para volver a mirar.”

Pareciera que la relación de Ureña con la ciudad es como la que se tiene con esa amistad de infancia con la que cada día se tiene cada vez menos en común, pero que a partir de una añoranza recuperan mutuamente sus conexiones. Esta relación hace que el artista sea uno los pocos confidentes que la ciudad tiene para compartir sus secretos, quien después pasa a traducirlos en obras visuales. De ahí la cualidad narrativa de la obra de José Pablo Ureña, para quien la ciudad no es un espacio sino un personaje.  Como buena de obra de arte, esto deja entrever contradicciones estéticas ¿habitamos la ciudad y por eso es ciudad? O es ¿la ciudad la que define a sus habitantes? Quizás Ureña deja estas y otras preguntas abiertas, después de todo rara vez coloca personas en sus espacios, y si están, siguen siendo parte del paisaje y no protagonistas.

Sin duda, el que la obra pueda expandirse tanto se debe también a la capacidad técnica del artista para poder reflejarlo. Desde el dibujo hasta la pintura acrílica, se cuentan por miles las obras que Ureña ha realizado de San José. En esta ocasión es la tiza pastel la que le ha permitido crear una exposición donde la ciudad se tambalea entre utopía y distopía. La tiza pastel es una técnica que se utiliza con poca frecuencia y calidad en la escena artística, con poca justicia, dado las cualidades únicas que tiene. Entre estas, las transparencias y capas que se trasponen en el papel, desde el color del soporte, hasta el detalle de un color aplicado para finalizar; son estas interacciones cromáticas las que hacen que tenga una vibración como pocas. En añadido, cae perfectamente con el concepto artístico, donde la ciudad, al igual que la obra, se conforma de detalles y partes.

Ambos “Josés”, tanto el San José como José Pablo Ureña, nos transmiten sin duda un confesionario urbano en esta exposición.  “San José es una ciudad incompleta, que no complace los deseos, que nunca es suficiente. Yo sigo tocando su puerta continuamente, dando los mismos giros a la elipse de los tiempos.”