Enrique Kayejero nace en Costa Rica en 1974, y egresa de la Escuela de Bellas Artes, Universidad de Costa Rica, en 1999.

La pintura de Kayejero es de una insurgencia familiar; es esa anarquía latinoamericana que se resiste como un impulso ante ordenanza y la jerarquía vertical. No por ello significa que sea una pintura agresiva o violenta, es provocativa y de garras afiladas, pero no perversa; se pone los guantes justamente para combatir bajo reglas justas. 

Su obra explora con los materiales, palimpsestos y sobreposiciones, una obra que se balancea entre la abstracción y la figuración. Ante todo, es expresionista y un espejo de lo que el artista recibe emocionalmente del entorno urbano.

Su investigación pictórica parte de la observación de la ciudad, observa las paredes de las casas y cómo las personas estilizan sus hogares y fachadas. El artista nota esos compartimientos estéticos de la cultura costarricense y latinoamericana que incorpora a su método creativo, como cuando una persona pinta una fachada, y para no desperdiciar el sobrante de pintura, empieza a retocar por acá y por allá partes del portón, tuberías, objetos del jardín.

Su obra en este sentido es de reúso en dos vertientes, es la reutilización literal de pintura que queda en el fondo de botes, es también la reutilización iconográfica de imágenes que encuentra en la calle.

La atemporalidad de sus obras aparece porque no se fija con las leyes del tiempo; no tiene un antes o un después; se fijan en una persistencia y vigencia propia del sueño y la vigilia. En los lienzos renacen materiales, formas, dibujos antiguos, pensamientos futuros, miradas presentes.

Casa amarilla | técnica mixta | 130 x 130 cm | 2024 | $5500 + i.v.a

De alguna manera sus obras logran ordenar el caos, el cual le persiste al tiempo. Su taller es un espacio donde se acaparan objetos y juegos visuales; un espacio que parece encapsular un tiempo perdido. El taller habitado por Kayejero es un laboratorio de abstracciones que da lugar a una muestra que se aprecia como un aglomerado cultural y pictórico; esa mezcla continua de referencias, citas e influencias.